Esparragosa de la Serena ha sido uno de los pueblos de la comarca que mejor ha sabido conservar las muestras de arquitectura popular, y por ello hoy en día las encontramos de diferentes tipologías:
En primer lugar, viviendas de los siglos XVI al XVIII, que presentan dos pisos de extensas fachadas con ventanas recercadas de granito. Como detalles decorativos cuentan con pomas, ajimeces para los casos más ricos, arcos conopiales en puertas y esquinas en chaflán. Estos detalles, son el escaso testimonio que el estilo gótico tardío dejó impreso en la arquitectura popular de la villa y la comarca.
Como decimos en Esparragosa de la Serena, aún persisten numerosos ejemplos de casas solariegas de cierto interés para la arquitectura popular. Un ejemplo de mención por su buena factura y sobriedad constructiva, es la llamada Casa del Capitán. Sirviendo de esquina en un pequeño ensanche, nos sorprende una fachada con dos vanos en altura y un emblema heráldico en medio. La fábrica es de sillería granítica y piedra caliza en dos colores para el escudo; en blanco el campo, con cinco flores de lis y estrella, y la inscripción, y en rosado el yelmo. Los dos vanos y el escudo tienen recercos graníticos en una sola pieza. En el dintel del superior se graba otro emblema. Se completa la fachada con moldura en el vano inferior, ménsula sobre el escudo sobre la que se superpone el pequeño balcón con repisa, cornisa bajo el alero y una sencilla gárgola de piedra.
Esta vivienda, mandada hacer por Diego Maldonado, capitán de Infantería y Familiar del Santo Oficio de la Inquisición, es una construcción de principios del siglo XVII y fue de colada entera con ancho paso central en torno al cual se distribuyeron las habitaciones.
Otras casas típicas tanto de labradores como hidalgos las podemos encontrar en la Calle Honda, Francisco Pizarro, Francisco Cañamero, Mártires, Calle Erillas y Plaza de Don Simón Gutiérrez, de la Constitución y de España, donde en muchas de ellas hay escudos heráldicos en su fachadas.
Javier Campos Garrido